«ni mirar le plaze. Son estos contados en los que digo todos aquellos que sus opiniones falsas y malas abraçan y quieren sin querer oyr la verdad contraria de su falsia que les pudiera dar el remedio y no lo acogen: tanto es el odio tanto aborrecen la cierta verdad quando je·les dizen que siempre se van haziendo peores en sus grandes errores endureçidos: porque no les plaze pensar lo contrario de su voluntad por mala que»