«aquella palabra dulçe. Venid benditos de·mi padre posseed el regño aparejado para vos otros del comienço del mundo. Pues imprime e encomienda todas estas cosas a·tu voluntad e todas las cosas transitorias e poco durables arredrando de·ti totalmente como ponçoña buelue el tu coraçon a·la pobreza voluntaria enteramente: e assi te sera deuido por prometimiento el regño de los cielos: segund que dize nuestro Señor. Bien aventurados son los pobres de spiritu»