«hombre de carne: los suyos por semblante bien como suyos derrajauan quantos fallauan: y dauan tan fieros golpes que luego los del conde don Pedro afloxaron y dieron logar: el conde mismo de que vido el denuedo y valentia del rey luego desamparo el campo y fuyo de·la batalla: porque sepays que son amores de mugeres: que mas afloxan derriban y quebrantan los nobles coraçones que no los despiertan y leuantan para la virtud:»