«llamados de su misma patria. El mismo nombre bien merecio el dicho maestre porque recibiendo cinco heridas en su persona de·las quales vna mortal se juzgaua echo defuera de su ciudad los perfidos turchos: entonce hauia sobre los adarbes dos mil y quinientos de·los enemigos muy bien armados y empues d·ellos tantos que las cauas y tierra cobrian donde afirmauan vnos perfugos ser fasta quarenta mil hombres o mas. El primer afruento de su virtud»