«eran tendidos despues por los calles. Quando seguian en su alcançe nuestros caualleros fue tan apretado que muchos mataron dentro de·las tiendas fasta que trayeron la misma bandera del perfido bassa encima las torres que stauan caydas de nuestros adarbes: morieron de turcos en esta jornada tres mil quinientos cuyos cuerpos eran por entre las cauas sus tiendas y mar manzilla sangrienta por los suyos y mucho consuelo a·los fieles de Jesu Christo. Houo del principio del»