«e se cuyta de arepentir. Obedesçe ruegos de aquel que te pide perdon. Quien otorga la herada, es razon que le sea perdonada. El buen saber del perdonar, vale mas que non el buen saber del vengar. Dizen que vn rey mando matar gran conpaña de catiuos. Dixo vno d·ellos: señor, nosotros auemos fecho gran mal e heramos, que bien faras tu enperador? Dixo el rey no ay ninguno»