«ninguno que muere se deue quexar saluo aquell que mala fama le queda por testimonio. Mira exemplo en los antigos romanos que menospreciauan la vida por el famoso morir. Pues si aquella muerte que muy apareiada te veo te viniesse no te daria tal lohor como aquella de Lucrecia que para siempre quedara su memoria: y el fin d·ella es loor y exemplo de·los que bien viuen: pues aquello deuemos guardar que mas loados nos»