«ninguno se podra apeldar: ni haura ende partido de fuyr. Ca dize el Psalmista. Adonde fuyre de tu spiritu: o adonde fuyre de tu faz? Si subiere al cielo: tu ende estas. Si descendiere al infierno, presente estas. Onde enĀ·el .ix. capitulo de Amos: dize Dios fablando del pecador. Fuyra, e no se saluara. E el que fuyere ahun que descendia al infierno: dende lo sacara»