«y lagrimas y sospiros rompen cada dia los cielos de tus agrauios y pides gualardon de mjs jniurias. O apassionada yo ! que si a lo que te so obligada quisieses que te pagasse, con los agudos dientes y ayradas manos te espedaçaria, y no podria yo puesto que te matasse aquella vengança tomar que medio satisfecha quedasse. No creas Cupido que enemistat tan grande criatura vmana te tenga, si tu no la mesclases, mas»