«ni esperança de·los poder bien escreuir: porque vencer y despues de tan vencida su Hespaña ganar: y despues de todo el poniente perdido: nuestros tan pocos y tan escondidos aragoneses a los tan muchos y tan infinitos alarabes: nuestros tan flacos y tan corridos cristianos a los tan rezios y tan pujantes reyes moros: nuestros catholicos y tan retraydos varones mas tan encerrados por montes y cueuas a·los tan publicos vençedores del campo que»