«de nuestra sangre y ensuziaran nuestras personas? Y estos son los esposos que nos teniades aparejados? Estas son las bodas de que sperauamos gozar? Y para esto nos guardastes para yr a seruir de esclauas a·los fieros alarabes y a·los crudos enemigos de Dios? Quanto nos fuera mejor o que murieramos quando niñas o que la muerte atajasse agora tal vida porque nunca llegaramos a ver tal perdimiento. No auia quien podiesse ni abstener·»