«dexo de reconoçer por donde: que tal suele ser enbeueçimiento de·la caça? Que no dexa mirar por donde se pone el cauallo: y assi con el plazer de·la caça y vozeria grande que andaua el cauallo alboroçado corria no tan con tiento como fuera menester: corriendo estropeço de tal guisa que dio consigo y con el rey en tierra: la cayda y el golpe fue tal y tan grande que el rey se quebro»