«de·las galeas contrarias mas no sin gran costa de sangre de caualleros que teñida estaua la mar de·la sangre tanta que se hauia derramada y quajada quasi de·los tantos cuerpos muertos que se hauian perdido: podiera se alcançar si mas diligencia se diera la valiente galea en que don Fadrique fuyo: mas el pujante rey vencedor mando que dexassen de·la mucho seguir. Abaste dixo el rey del tanto daño fecho no se faga todo»