«e ynmunda. Pues quien lo quiere acabar e vençer asy como el solitario conuiene acorrer·se e retraer a·la solidunbre juntando sus espirituales fuerças que se derraman en·la conpañia e vso de·las gentes rafez mente. E alli dar·sse a profunda humilldat que es conservadriz del solitario estado teniendo emiente que sean regidas sus santas jnclinaçiones cauallerilmente e discreta. Con persseuerançia. E por mucho que el cuerpo lo inpunge a·la fin humilldat lo»