«le dad, con que eternalmente e sin fin sea tormentado. O quanta es la locura del hombre por los deleytes, o riquezas, o por alguna cosa terrena querer suffrir perpetuos tormentos del cuerpo: e de·la alma. Onde Crisostomo en·el libro de Reparatione Lapsi: dize assi. Di me quantos tiempos de luxuria: que spacio de plazeres: quieres comparar a·las penas sempiternas. Demos siquier cient años a·los plazeres:»