«gran diligencia tienen los moros en guardar el puerto: tienen dos cabeços siquier alturas hechas por manos donde stan siempre sus atalayas que alcançan vista de muy alexos: y quando quiera que velas descubren hazen lo saber a su almiraldo el qual embia luego vna fusta de·las liuianas porque demande quien son los que vienen: y ahun que sea de creer dificil dire yo la forma que para esto ellos aguardan en tal manera. El almiraldo»