«qualquier creatura del mundo es vanidad. Ca ( segun dize el Psalmista ) qualquier hombre viuiente es vanidad. Tu piensas viuir mucho tiempo: e posseer estas cosas temporales muchos años en deleytes e plazeres: mas por·cierto amado mio: no es assi. Ca los dias del hombre passan como sombra. Ahe ya vees: que los dias de tus años seran pocos: e tu obispado haura otro. Por·ende no te prometas»