«del que ama. E si lo auenturare sea çierto aquel pues ya lo tiene borado de su boluntat no poseer·la luengo tiempo: car el enamorado avn que conoçe que aquella fermosura sea stada causa prinçipal de auer·la amada y segujda, tanbien conoçe aquella ser causa prinçipal de perder·la. Y no querja poner en arjsgo lo que con jnfinjtos trabaios gano por que la cosa que mucho cuesta con gran dificultat se dexa perder .»