«entre el madero e la corteza fasta tres dedos al traues. e guarda bien que aquella corteza non se rompa. Empero yo he visto que algunos fienden la corteza e non han mjedo que se rompa. E luego que avras sacado el tasco tu·y meteras el enxierto o empelt. el qual tu deues ya antes auer cortado de·la vna parte fasta el coraçon. Asy empero que el coraçon del »