«y como llegando fue bien recebido en casa del suegro las malenconias fueron mediadas y pudo venir ende aquello que dize Terencio cartaginense en la comedia suya primera. Las iras quier sañas de·los que se aman crescen el amor y doble le bueluen. Despues de passados ya .iiij. dias en casa del suegro tomo su mujer este leuita y boluio camino para su tierra el qual no queriendo aluergar de noche con estrañas generaciones de·las comarchas»