«començo de dezir. Señor no soy yo aquel a quien vino la suerte: mas era la liebre. la qual yo trahia en mi compaña: para que se cumpliesse en·ella como en·los otros vuestro apetito. E llego a nosotros esta mañana vn leon muy grande y sañudo para toma·lla. Y dixe le yo: como la liebre venia por ser vuestro mañar aquel dia por que assi estaua ordenado y »