«que no oluidas tan vana codicia? Por·que no te averguenças de·la compaña de·los malos y sin piadad. cuya gloria despareçe como la sombra: y su bien tuuiendo lo quasi en·la mano desuaneçe. y no lo dessea saluo el que es tuuido por loco. O alma mia: por que no eres humilde: y por que no conosces las grandes merçedes que recebiste de Dios: y te contentas del »