«que tan deliberadamente te matas? Conto le la leona todo su caso. E como la raposa lo hoyo dixo·le: Amiga. no deues assi trabajar tu persona: ni fazer tan stremos dolores y llantos. Considerar deues el justo juyzio de Dios: ca nunca el caçador te hiziera daño tan grande: si tu no fizieras otros semejantes a muchos. Por·ende reconpensa las cosas con discrecion: y toma paciencia en·los males. »