«se nos lleuo nuestros fijos. El masclo estimando poco lo que la mar podia dañar·le: jamas quiso partir se por mucho que la fembra le pudo dezir. Por cierto dixo ella: no hai mayor enemiga en·el mundo: que la que el hombre tiene consigo quando no quiere conoscer a·ssi mismo. y tal eres tu: que ni temes el peligro que tienes presente: ni quieres recebir consejo de tus »