«consejo que yo deuia morir: faziendo les para ello argumentos tan euidente y claros. que si no las çegara bestialdad y soberbia: no deuian dexar de·lo asi hazer. e hoy se estuuieran en sus stados muy prosperos. mas todas tuuieron en poco el consejo de aquella: no haziendo caso de mi. ni de quanto yo pudiesse pensar ni hazer: y con aquesto cayeron engañadas. Bien conosco respuso el rey. que »