«no hauia querido consentir su maldad. E assi por muchos dias los papagayos cantauan sus cantos: y dezian de continuo lo que les hauia sido mostrado: e por ser la lengua en que lo dezian estraƱa ninguno los podia entender. Llegaron vn dia a casa de aquel hombre de pro dos jndianos peregrinos que yuan en Roma. los quales por caridad conuido a yantar. e por fazer les mayor fiesta despues »