«pastor con auarcas en los pies vino·se a·las cortes: y despues de hauer oydo la necessidad y angustia en que estauan sobre quien escogerian por rey: leuanto se el magnifico cauallero y dixo les. Poned señores aparte la turbacion y enojo en que estays: y dad gracias a nuestro Señor por la merçed que nos fizo en nos tan bien remediar y hauer nos mejor proueydo que no mereçemos cerca de aquello que tanto nos»