«que por sus manos hauian ganado. offreciendo le en su caso y lugar los fallaria para su honrra y seruicio muy diligentes. E dixieron le: no quieras sacar aquel hombre del silo: el qual es jngratissimo. e de su salida no te puede venir sino daño. E queriendo se despedir d·el: dixo el ximio señor si en cosa alguna de mi seruicio te puedes aprouechar: tengo yo mi habitacion en »