«que siempre e de continuo piensa que ha de morir. Ca el codiciar, e appetecer de los ojos: es menospreciado, quando alguno piensa que tan cedo ha de dexar todas las cosas. La concupiscencia, e appetito carnal es desechado: quando alguno piensa, que su cuerpo sera en vn instante manjar para los gusanos. La soberuia de·la vida es menospreciada: quando alguno en su coraçon piensa: que el que quiere»