«a·los que estauan presentes diziendo. Hoistes nunca vosotros que las aves de buelo se lieuen los moços? Entonces respuso el mercader. No es de marauillar que en la tierra donde los ratones se comen mil libras de fierro. que las aves se lieuen los niños. Conoscio entonces el falso amigo que el mercader por vengar se de su maldad lo tenia. y pidio le por merced: que le perdonasse: y »