«ninguna d·ellas te puedes gozar. y desseas la que no puedes hauer. Entonces creo el rey que Beled hauia verdaderamente muerto la reyna: y dixo le. Por sola vna offensa que acahescio. en vn momento mataste luego la reyna: sin mirar mas en·ello: ni dilatar lo algun poquito de spacio. Respuso Beled. No deuen las palabras y mandamientos del rey tener causa de reuocar·se. Dixo el rey. grande »