«ojos de sus armados: e no la escapara: ni la librara hombre de mi mano. O quan desolados e quan tristes estaran aquel dia los peccadores desuenturados. Ca entonce ( segun se scriue en·el .j. del Apocalipsi ) todo ojo lo vera: e los que lo puncharon. E faran llanto sobre el todos los tribus e generaciones de·la tierra. Entonce el peccador vera e se enseñara e apretara: e reganara sus»