«has raydo de tu coraçon enteramente el odio que comigo tenias enuegecido: muy de cierto lo yerras. ca las personas de justa y buena consciencia: de ligero oluidan el odio. y ahun que hayan sido offendidas: con vn solo seruicio remiten sus passadas offensas. y allende de aquesto reciben los que les ofendieron en lugar de amigos muy singulares. e nunca vi que los ingratos medrassen: mas vi los mansuetos y »