«en·el humano consorcio. Hoyendo el maestro de·los cozineros sus manzillas tan publicas: muy demudado en·el rostro: metida la lengua en·el paladar callo: que no pudo mas responder de confuso.§ No fue perezoso el notario que ende estaua en·la corte de continuar los actos: de·la suerte que cadavno d·ellos los huuo fablado. de·los quales luego en·esse punto fizo relacion fidelissima a su rey »