«amansado y differido tu ira: tan humilmente y pacifica: no quiso Dios oluidar tus oraciones: ni desmamparar tus rogarias. Sepas que viue la reyna: e si en algo mi piadad te ha offendido: en tu poder estoy: faz lo que quisieres de mi: que si peccado hay en·la misericordia: en mi peccado soy contento morir. Oyendo esto el rey fue tan alegre: que de gran rato no le pudo hablar: »