«el parecia cabron: y assi le dexo luego sin responder·les cosa ninguna: e se fue con verguença a su celda. Ellos tomaron el cabron despues de su hida: y partieron se·lo. Por·ende pues las grajas son mas esforçadas y no podemos vengar nos d·ellas por fuerça. mejor es buscar algunos remedios de ingenio con los quales tomemos d·ellas vengança. e si mi consejo quisieres seguir: por·»