«y las sanctas ordinaciones de aquella. La segunda en procurar las cosas necessarias para·l viuir. La tercera justificar sus operaciones entre si y los otros. E deuen se mucho guardar y arredrar de otras quatro mortiferas y muy dañosas. La primera es: en·la propia arte ser negligente. La segunda: quebrantar lo que manda la ley. La tercera: creer rafezmente todas las cosas. La quarta denegar la sauieza. Por·ende »