«Y pues tu me ofreçiste no solo tus obras. mas tu persona: e yo a ti la mia. ningun reçelo me queda de tu amistad. la qual tengo por muy verdadera y perfecta. Y assi salio del todo el raton de huera. y los dos se fizieron grandes profiertas y cortesias. y habitaron en vno muchos dias muy pacificamente y con grand confiança: recontado cadaqual infinitas nouedades. A cabo de dias »