«tenemos: e no esperemos aqui nuestra muerte. Interrogado el tercero: les dixo. Señores no me pareçe deuemos dexar nuestras moradas por tan liuiano temor: mas tengo por bien que resistamos a nuestro aduersario: e que sienta en nosotros esfuerço: e catemos con diligencia quando el terna alguna caça entre manos ceuando se d·ella: muy descuydado: para que yo con algunos de vosotros los mas esforçados lleguemos a el muy mansuetos »