«dia primero. E como el juez y el leonpardo se despidiessen. llego la madre del rey: y con furioso rostro le dixo. Si algo hablare con tigo fijo de presente mas aspero de·lo que solia. no te desplega por que veo tu negligencia en no saber discernir lo que te aprouecha: o te daña. Acuerda·me hauer te auisado: que no dexasses subuertir tu recto juyzio. y que no escuchasses »