«de mi crueldad asaz razonable: e podran tanto tus amenazas que te librare en·esse punto mis fijos. E si aquesto no puedes hazer: en vano trabajas de amenazar a quien esta en seguro de ti. E dado aqueste consejo. se boluio a su arbol el paxaro. Viniendo el tiempo que la paloma sacaua los fijos: llego la raposa al pie del arbol: e començo de amenazar y brauear como solia. »