«la hora que el radiante Apolo bañado en las esperias ondas con sus doradas crines la rica posada de Neptuno alumbrar començaua e con altas gridas e bozes discordes las parleras aues buscan el reposado aloie. estaua retraydo de humana compañia. mas non de cuydados anxias congoxas e rauias era solo. de males tristezas daños y varias contemplaciones: non menos affligida que seguida veya la triste vida mia passando aquella en »