«delante los quales descubrio el caso llorando agramente e dolorosa: a cuyas palabras todos dieron plenaria fe. e començaron de·la consolar e conuertir la fabla en la obra del peccado diziendo que por la constreñida e forçada voluntad el cuerpo non pecaua: e que a·do non fue deliberacion non fue culpa. Entonce dixo Lucrecia considerad aquello que a·uos toca: o es conuenible ca yo de mj peccado me »