«lo deuido no comas ante del tiempo el fructo que no sembraste. E assy razonando con rauia paterna en accelarado moto al lecho do el enfermo de amores yazia yua e con dulces besos la fruente e oios besaua del fiel enamorado. e la su amarilla cara con abondoso arroyo de llagrimas refrescaua e con bozes roncas e llorosas dezia el doloroso padre. Ay de mi desauenturado. ay mi amado fijo. »