«trayendo·la e guiando·la el muy encendido amor que a aquel tenia. e con mano esforçada e coraçon audace gano la entrada de·la cibdat. e sabida la dolorosa nueua de·la muerte de Hector con grandes querellas e angustias por muchos dias la lloro. e lamentando se dizia la triste reyna. O varia e rodante Fortuna. o cruos fados por que no me iudigastes digna de·la uista del »