«trunco de su cabdillo espauorescidos de diuinal pauor esparzidos los vnos e los otros el fuyr tomaron por reparo. En los quales los de·la cibdat por conseio de·la scientifica e virtuosa dueña fizieron jnnumerable mortandat de tal manera que no ganaron la desseada salut saluo aquellos que por virtud de·los pies equjneos auer pudieron su tierra. Qual seria la humanal sabiduria eloquencia e fermosa fabla que bastasse a »