«de·la claridat de su cara e de·la eloquencia suya inbio secretamente letras por las cercanas prouincias a·todos los rethoricos e nigromantes que viniessen luego al pretorio de Alexandria. El mensaiero compliendo el mandado del señor traxo consigo sinquenta sabios que en sabiduria dizian sobrepuiar los mortales. En este comedio la virgen Catherina era obseruada por mandado del emperador e sabido el venidero conflicto encomendo al señor el peligro »