«sinquenta sabios. turbados por la manifiesta virtud de Dios. acatando se vnos a·otros al silencio se arrimaron. De·lo qual el emperador fue muy indignado: e con furia no templada los redarguyo: e el mas anciano de aquellos respondio. Sin dubda te confessamos emperador. que sy nos otra secta mas aprouada no demuestras que esta que fasta aqui avemos tenido todos nos tornamos a Xpisto. el verdadero dios dezimos: e »