«non parescia. la egrotante dueña por ser librada de tanto fiero tormento a su señora con afectuosas preses suplico que al summo Dios merced por ella demandasse. lo qual otorgado e fecho sana perpetuamente remanescio. Siguiendo su biaie esta gloriosa señora en verço de·la cibdad del Porto: concurrio a ella vna muger trayendo vna fiya suya priuada de su nascimiento de·la corporal vista. la qual suplico las reales »