«Vulcano lo sacrificar. Pero a·la fin sallido del tal laberinto yo quise mas que la poca sabiduria mia a·todos se manifestasse que de mi amigable exercicio non coger algund fructo. el qual fructo solo yo quiero que sea embiar a·uos mi muy principal señora esta breua satira por tres respectos. El primero conosciendo vuestra muy singular discrecion e natural ingenio sobrepuiar a toda prudencia e artificial industria. de·»